El presidente Andrés Manuel López Obrador dio el banderazo al arranque de las obras de rehabilitación en las vías del tren para conectar los puertos de Salina Cruz, Oaxaca, a Coatzacoalcos, Veracruz, con la petición de “amarrar” bien el proyecto para que no haya tentaciones en el futuro de echarlo para atrás o de privatizarlo.
Durante el evento, el mandatario dijo que es necesario aplicar una fórmula con la que tanto el gobierno federal como los gobiernos de Oaxaca y Veracruz sean propietarios de esta empresa pública con la finalidad de que se mantenga operando.
“Tenemos que cuidar que al cambio de gobierno no se vaya a privatizar este proyecto, tenemos que pensar en cómo lo dejamos bien consolidado en lo administrativo, que las concesiones queden en firme para prohibir la privatización(…) Para que no se privaticen estos bienes, que sean de la federación y los estados, hay que pensar en eso, porque tenemos que evitar que regrese la corrupción, que nunca más vuelva el saqueo”, dijo el Presidente desde Medias Aguas, en Sayula Veracruz.
El proyecto tiene una inversión inicial de 3 mil 113 millones de pesos y consiste en reparar 185 kilómetros de líneas ferroviarias con cambio de rieles, construir nuevos puentes, estabilizar taludes, cunetas, rehabilitar estaciones ferroviarias e instalar fibra óptica a lo largo del recorrido.
Con estos trabajos el tren de carga podrá viajar a una velocidad de 70 kilómetros por hora y el de pasajeros a 100 kilómetros por hora.
“Esta inversión en su etapa constructiva se van a generar 7 mil empleos, esto va a ayudar sobre todo ahora que se está padeciendo por la pandemia que está afectando la economía popular esto va a ayudar a que haya trabajo, aquí en estos tramos que ya se licitaron. Es una inversión de más de 3 mil millones de pesos para iniciar en total estamos contemplando invertir en este proyecto alrededor de 20 mil millones”, explicó.
López Obrador recordó que para darle estabilidad al proyecto se van a construir 10 parques industriales a lo largo de la ruta en donde se buscará la instalación de empresas que aprovechen el tren de carga, la conexión entre el Pacífico y el Atlántico y al mismo tiempo den empleo a los pobladores de la región.
Para lograrlo se otorgarán incentivos fiscales a la iniciativa privada tal como ocurre en la frontera norte del país, explicó. “Es decir se paga menos por gasolinas por el diésel, por la luz, lo que queremos en el corredor dar facilidades para que lleguen empresas y se generen empleos. Lo que estamos concibiendo es poner en el Istmo y en el sureste cortinas para detener a la gente que no se vea en la necesidad de abandonar sus comunidades, que haya empleo en el Istmo”, puntualizó.
Durante el evento, decenas de personas se congregaron en la calle principal del pueblo para ver la llegada del Presidente e intentar saludarlo. Sin embargo, fueron colocadas vallas metálicas que impidieron el paso de los curiosos pero no se evitó que se reunieran sin sana distancia.
Algunos vecinos de la zona donde se realizó el evento lograron colarse hasta el último filtro desde donde pudieron observar el acto protocolario y aplaudirle a López Obrador.
