Por no contar con los permisos para funcionar y por mantener en condiciones insalubres y de hacinamiento a 19 internos, entre ellos una mujer y un menor de edad, el gobierno de Yautepec a través de las direcciones de Obras Públicas, Protección Civil y Bomberos, así como Licencias y Reglamentos clausuraron el domicilio particular donde operaba clandestinamente la Clínica de Rehabilitación «Hay Una Esperanza», ubicada en la carretera Jojutla-Yautepec, en la colonia Diego Ruiz.
Tras recibir varias llamadas ciudadanas donde informaban de la existencia de dicha “clínica” que violentaba los derechos humanos de quienes sufren por una adicción, personal y directores de diversas áreas, apoyados por el departamento Jurídico y la Dirección de Derechos Humanos de la comuna, se realizó una visita al domicilio donde se entrevistó a Leslie Lara Miranda, quien dijo ser la responsable.
Previa identificación y con el permiso firmado por la encargada, las autoridades Ingresaron al domicilio donde se pudo constatar que se trata de una casa habitación que no reúne las condiciones para atender a pacientes con problemas de adicciones.
Los dormitorios tenían rejas como si se tratara de una cárcel, en una de las habitaciones se encontró a 12 hombres y un menor que dormían en literas de un metro de ancho, donde además hacían sus necesidades fisiológicas en una bacinica que después retiraban para desalojarlas al sanitario. Tampoco contaban con personal médico y de enfermería, así como profesionales que atendieran a los internos.
Al solicitar la licencia de funcionamiento, cambio de uso de suelo, protocolos sanitarios y de seguridad, no fue mostrado ningún documento, razón por la cual se procedió a la clausura.
Antes de que fueran colocados los sellos, se llamó a los familiares para que fueran entregados los pacientes.
Por su parte, la Procuraduría de la Defensa de las Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia del municipio, tomó declaraciones y continuará con algunos casos de quienes fue su deseo actuar en contra de los responsables.