En la Cámara de Diputados, el abrupto fin de la sesión ordinaria en que se discutía la prohibición a los delfinarios impulsada por la bancada del Partido Verde Ecologista (PVEM), fue el preámbulo del inicio de las “vacaciones” de Semana Santa para los congresistas.
Los diputados, que dieron por terminada la sesión dos minutos antes de las cuatro de la tarde de este jueves 6 de abril, dejaron pendiente la discusión de los dictámenes de comisiones como la de Transportes, que endurecerán las sanciones a las aerolíneas en caso de abusos contra el cliente.
Tampoco tocaron asuntos que tenían previsto abordar, como el punto de acuerdo de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), sobre el caso del “narco” Fiscal de Nayarit, Edgar Veytia y el exhorto al gobernador de esa entidad, Roberto Sandoval, a que se separe del cargo y se someta a investigación por su cercanía con el funcionario detenido en Estados Unidos por delitos contra la salud.
La presidenta de la Mesa Directiva, Guadalupe Murguía, citó a la siguiente sesión hasta el martes 18 de abril, por lo que los diputados se ausentarán del recinto más de una semana, 11 días naturales o bien, siete días hábiles sin contar dos fines de semana completos.
La reunión ordinaria de este jueves arrancó, como cotidianamente ocurre, más de una hora después de la cita formal, prevista a las 11:00 horas.
Los trabajos parlamentarios iniciaron a las 12:25 de la tarde, con una asistencia de apenas 289 de 500 congresistas.
En el transcurso de la sesión se presentaron una serie de iniciativas, pero al entrar al dictamen de la prohibición a los delfinarios, propuesta por el PVEM, las protestas contra ese proyecto, contra el desempeño de los verdes en la Mesa Directiva, contra el recuento poco claro de la votación de dos mociones suspensivas y contra la presencia de cabilderos en el salón de Plenos, obligaron a terminar con las labores legislativas que para ese entonces, ya no contaban con el quórum necesario.