En el gobierno de Andrés Manuel López Obrador “se dejará de ver al migrante —extranjero, sobre todo centroamericano— como un delincuente”, aclaró el futuro canciller mexicano Marcelo Ebrard, en vísperas de la reunión del presidente electo Andrés Manuel López Obrador con el primer mandatario de Guatemala, Jimmy Morales, a realizarse este martes 28 de agosto del 2018 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Tras detallar que ésta será la primera reunión del presidente electo de México López Obrador con un mandatario, el presidente de Guatemala, Jimmy Morales, Ebrard Casaubón detalló que también estarán en el encuentro el gobernador constitucional de Chiapas, Manuel Velasco y el mandatario estatal electo, Rutilio Escandón.
Los presentes en la mesa profundizarán en los problemas de la frontera compartida al sur de México, a partir de tres ejes que definirán la relación bilateral con Centroamérica: respeto a los derechos humanos de propios y migrantes; políticas integrales de seguridad y fortalecimiento del estado de derecho y proyectos de desarrollo en las comunidades de origen de los principales flujos migratorios, agregó.
En la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte “aún hay temas pendientes, nos mantenemos muy atentos sobre qué avances hay” entre hoy y mañana, “esto no se acaba hasta que se acaba”, señaló el futuro canciller mexicano Marcelo Ebrard al negarse a especular sobre el alcance de un pronto acuerdo.
Consultado sobre la insistencia del presidente Donald Trump de construir un muro en la frontera con México para detener el flujo migratorio, el futuro canciller Marcelo Ebrard aclaró que por ahora “no estamos discutiendo eso” con Estados Unidos, los acercamientos han sido para tener “certidumbre económica” al arranque del nuevo régimen.
Aclaró que de la nueva estrategia de seguridad (que está en proceso de elaboración en espera de las conclusiones de los Foros de Pacificación) partirán otras áreas como la cooperación para el combate del narcotráfico e incluso, revisión y permanencia de programas bilaterales como la Iniciativa Merida con Estados Unidos.
Ebrard Casaubón apuntó que se tratará de persuadir a Estados Unidos (como propuso López Obrador en la carta que mandó al presidente Donald Trump) y a otros países —como Canadá y la Unión Europea— a que participen del en aumento al financiamiento que impulsen el trabajo y al desarrollo en Centro y Sudamérica.
“Si quieren participar, que bueno, pero esta es una iniciativa” regional de América Latina, acotó el futuro canciller.
Tras la reunión del martes entre López Obrador y Morales Cabrera el próximo martes en la Universidad Autónoma de Chiapas, campus Tuxtla Gutiérrez; el miércoles 29 de agosto, en las oficinas de la transición en la Ciudad de México, el presidente electo López Obrador sostendrá un encuentro con los representantes diplomáticos de Centroamérica y América del Sur; “no será solo una salutación política”, sino será el primero de varias mesas periódicas que se mantendrán con los países del hemisferio en el futuro régimen.
“A pesar de las diferencias tenemos que trabajar en conjunto con una visión de futuro común”, subrayó Ebrard Casaubón al confirmar que se invitó “a todos” los diplomáticos de Centro y Sudamérica.