En entrevista, el funcionario precisó que uno de los tiraderos se ubica en la colonia Apozonalco, cerca de una barranca que colinda con el Río Apatlaco y otro en el campo “La Pintora”, aunque este último lo consideró “formal” (a pesar de no contar con los permisos correspondientes para su operatividad), toda vez que es donde se han depositado los desechos de la población en los últimos años.
“Los ciudadanos no entienden que es un basurero a cielo abierto, hemos trabajado con ellos pero no han querido entender, vamos a tomar cartas en el asunto y seguramente que ya en estos días estaremos cerrando, nosotros depositamos en un tiradero igual a cielo abierto”, comentó. Zeferino Díaz, recordó que son poco más de cinco toneladas de basura las que genera diariamente la población del nuevo municipio indígena.
Así mismo mencionó que están a la espera de que las autoridades correspondientes otorguen el permiso para que el tiradero a cielo abierto del campo “La Pintora”, opere de manera legal.
“Esperamos la respuesta de unos estudios referentes a ese tiradero, buscamos la manera de tener el tiradero pero en recubierta, separando la basura, lo que llevamos al lugar es material que se desintegra con la tierra de la naturaleza”, concluyó.
