El ictiosaurio, conocido como dragón marino, habitó nuestro planeta entre 250 y 90 millones de años atrás y podía alcanzar unos 25 metros de largo, pero recientemente se hizo el descubrimiento del fósil más grande que jamás se haya visto.
Fue en la Reserva Natural de Rutland, unos 120 kilómetros al norte de Londres, donde se halló el fósil de un dragón marino de hasta 10 metros de longitud.
El descubrimiento fue realizado por el paisajista Joe Davis, mientras trabajaba en el lugar en febrero del 2021. Las excavaciones comenzaron entre agosto y septiembre del 2021, luego de que descendiera el nivel del agua en el lago, y concluyeron a principios de este enero.
Se trata de “uno de los hallazgos más importantes en la historia de la paleontología británica”, a raíz del tamaño y el estado de conservación del esqueleto, según Dean Lomax, paleontólogo de la Universidad de Mánchester, que dirigió las excavaciones.
Se cree que el fósil estaba en esa zona, ya que hace 200 millones de años la región estaba cubierta por el agua debido a que los niveles oceánicos eran más elevados.
Los restos fueron retirados para próximas investigaciones, pero se plantea hacer una exhibición donde el público en general podrá verle.