Por: Alberto Pérez.
Para Cristian Tapia dueño de una papelería en el municipio de municipio de Cuernavaca, las ventas han disminuido entre un 60 y un 50% en relación al inicio de clases 2018, señala que las causas son el aumento del comercio informal dónde se encuentran productos de dudosa calidad a un precio mucho más bajo.
Expresó que esta situación los coloca en total desventaja competitiva y lo que ocurre debido a la displicencia de las autoridades, quienes no regulan esta actividad que es ilícita porque no pagan impuestos.
«Incrementa la venta un poco porque obviamente es temporada pero en comparación a otros años ha disminuido entre un 60 y un 50%, desgraciadamente la informalidad de la gente acapara el producto»
Cristian quién es empresario en este ramo desde hace 15 años, explicó que lo que hace el comercio informal es vender producto de baja calidad y sólo por temporadas, lo que abarata la mercancía, además de ser por lo general, producto de muy mala calidad y en ocasiones hasta pirata, sin embargo no los culpa ya que todos tienen derecho a buscar ingresos ante la mala situación económica que se vive.
«El comercio informal nos pega, nos pega todos y más a los que pagamos renta, impuestos, nuestros gastos a veces son de entre 5 a 6 mil pesos, no tengo trabajadores sí los tuviera, ya hubiera cerrado.»
Indicó que debido a que la economía en general está mal, sólo ha vendido sí acaso 10 listas de útiles completas, lo que contrasta con otros años donde los padres de familia le dejaban sus listas para surtir y ahora solo compran lo que no encuentran en la informalidad, adquiriendo sus cosas por partes útiles por partes.
El gasto que nos hacían antes era para un niño de un cendi de mil a dos mil pesos aproximadamente, para uno de primaria de 600 a mil pesos y ahora la gente se va a comprar a lo más económico.
«No sé si simplemente se pongan a vender como buenos mexicanos, pero si te das una vuelta por el centro, verás mucha informalidad desde los vendedores ambulantes hasta los automóviles que venden útiles en su cajuela, no sé si pagan impuestos o le paguen a alguien, quién sabe.»
En ese sentido solicitó a las autoridades regularicen la actividad informal, pero no sólo en el gremio papelero, en toda la actividad económica, porque desde el punto de vista de un dueño de negocio, lo que hacen las autoridades es fomentar la competencia desleal, porque venden a veces el mismo producto afuera del comercio establecido y nadie les dice nada.
A la gente que pagamos locales, que pagamos renta, a los que pagan empleados si afecta, yo hago un llamado a que los regularicen, que paguen algo y que se tome conciencia para los que si pagamos nuestros impuestos.
En el caso de los supermercados dijo desconocer quién supervisa los precios ya que en muchas ocasiones es exactamente el mismo producto que venden, sin embargo, las grandes empresas prácticamente lo regalan.
«El mejor año ha sido el 2015, este año no se que sea, si el nuevo gobierno o que, pero ha sido una constante y va en picada.»
Para Rosa Camacho propietaria de otra papelería, también han bajado sus ventas debido al comercio informal que no es regulado, aunado a que muchos de sus clientes tampoco están laborando en condiciones estables como en otros años.
«Es temporada de regreso a clases y no nos aumentado la venta, tenemos que pagar la renta, luz e impuestos, la gente prefiere irse al comercio informal que con quienes tenemos los documentos en regla y pagamos nuestros impuestos.»
«No vendido ninguna lista completa porque me dicen que ya fueron al centro sólo viene por lo que no encuentran.»
Pidió a las autoridades tenga mayores consideraciones para los que si pagan impuestos, porque el comercio informal, no solo obstruye calles, no pagan impuestos, vende productos clonados de mala calidad ante la complacencia de las autoridades.
«Yo pago aproximadamente 5 mil mensuales, y uno tiene que estarse tronando los dedos para cumplir con sus obligaciones y el gobierno no los regulariza pero tampoco les da las oportunidades.»
Según el colectivo, México ¿cómo vamos? Morelos cuenta con una tasa de informalidad laboral del 62.4 por ciento, porcentaje por arriba de la media nacional que es de 52%.