El pleno del Senado de la República aprobó este martes y turnó a los congresos estatales la reforma constitucional en materia política del Distrito Federal.
En la sesión, la última del periodo ordinario, se aprobaron con 74 votos a favor, 20 en contra y una abstención, los cambios legales que transformarán las estructuras políticas y de administración de la capital del país.
El dictamen especifica que la colegisladora hizo tres modificaciones al proyecto enviado por los senadores: la primera para sustituir la referencia al “salario mínimo diario vigente en la Ciudad de México” por el concepto de “valor diario de la Unidad de Medida y Actualización”, acorde a la reforma sobre desindexación del salario.
Otra para precisar que la fecha para que el Instituto Nacional Electoral (INE) expida la convocatoria para la elección de los integrantes de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México, sea “a más tardar dentro de los siguientes 15 días a partir de la publicación” de este decreto.
Asimismo se respaldó la decisión de establecer que sea al término de marzo de 2016 la fecha para que los ciudadanos que deseen ser candidatos independientes a integrar la Asamblea Constituyente, no figuren en los registros de los partidos políticos.
El jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, celebró la aprobación de la reforma política del Distrito Federal, tras calificarla como un hecho histórico para la Ciudad de México y un logro de los ciudadanos.
En reunión con la Junta de Coordinación Política y con el presidente de la Mesa Directiva, Roberto Gil Zuarth, el Ejecutivo local agradeció al Senado y valoró la aprobación de la reforma política, “lo cierto es que cuando menos una buena parte de decenas de años se ha intentado que se consolide”, sostuvo.
“Hoy se tiene y he venido a reiterar mi agradecimiento a los senadores y senadoras de la República por este trabajo en favor de los habitantes de la Ciudad de México”.
Previamente, el jefe de Gobierno del Distrito Federal sostuvo que con esa aprobación se acredita la participación de muchos actores políticos, intelectuales y de personas interesadas en la reforma política de la capital.
“Ha sido una participación plural desde la creación del proyecto, desde los que estuvieron impulsando su curso, hasta ahora”, añadió.
Además contará con autonomía, derechos, obligaciones, y con carácter libre y soberano respecto a su régimen interior.
La Ciudad de México no tendrá la denominación de “estado”, sino que será una “entidad” más de la República Mexicana, según la nueva redacción del artículo 43 de la Constitución.
La capital sigue siendo la “sede de los Poderes de la Unión y Capital de los Estados Unidos Mexicanos”, y la única forma en que podría convertirse en estado es si los poderes federales se trasladan a otro lugar.