El presidente del Comité Ejecutivo del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, demandó que el gobierno de Estados Unidos no se entrometa en las elecciones en nuestro país.
En el Monumento a la Revolución, en la Ciudad de México, López Obrador manifestó que después de lo dicho por el secretario de Seguridad estadunidense, John Kelly, es preciso aclarar que a veces, lo que no es bueno para ellos, es decir, para los gobernantes estadunidenses, es bueno para los mexicanos.
“El secretario de Estado para la Seguridad Nacional de Estados Unidos llegó a declarar que si ganaba la izquierda en México no iba a ser bueno para Estados Unidos, que era malo para estados Unidos. Pues que se sepa que en algunas ocasiones, muchas veces, lo que es malo para ellos, es bueno para nosotros, los mexicanos. Ojalá y rectifiquen, nosotros no queremos confrontación”, planteó.
Antes de presentarse ante miles de personas que llegaron a las inmediaciones del Monumento a la Revolución, que en su gran mayoría llegaron en camiones que fueron estacionados en los alrededores de la Plaza de la República, el ex Jefe de Gobierno capitalino encabezó un acto similar en el estado de Hidalgo.
Más tarde, al presentar el Acuerdo Político de Unidad por la Prosperidad del Pueblo y el Renacimiento de México, ofreció sacar al pueblo de la pobreza, dio la bienvenida a todas las personas que se sumaron a su proyecto y reiteró que sus palabras sobre el Ejército Mexicano fueron malinterpretadas, pues siempre ha pensado que los soldados son el “pueblo uniformado” y si se convierte en el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, nunca ordenará reprimir a la población con la milicia.
A sus simpatizantes les pidió no “apanicarse” con la reedición de la campaña de miedo que se lanzó en el año 2006 y en 2012 en su contra, pues seguirá apoyando primero a los pobres. Asimismo, aclaró que como lo hizo durante su gestión en el anterior Distrito Federal, volverá a convocar a la iniciativa privada a participar en el proyecto de desarrollo del país.
Tras ofrecer que el país crecerá al 4 y si es posible al 6 por ciento para finales del siguiente sexenio, refrendó el llamado a que el gobierno norteamericano no se involucre en las elecciones en el territorio nacional.
Salió en defensa de la candidata de Morena en el Estado de México, Delfina Gómez; recriminó la clara intervención del Gobierno Federal en esos comicios y advirtió que en el Congreso de la Unión, la mayoría impulsa la aprobación de reformas electorales que incluyen la segunda vuelta, ello, con el fin de impedirle que llegue a la Presidencia de la República.