Mi hija no era ni una alcohólica, ni una drogadicta, ni una pasea perros, como quisieron hacerlo ver”, enfatizó la Araceli Orozco, madre de Lesvy, la joven de 22 años que fue hallada sin vida el los alrededores del Instituto de Ingenieria en Ciudad Universitaria de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
«Era nuestra única hija. Lesvy había decidido vivir independiente de nosotros, vivía en unión libre con su pareja», comentó Orozco.
Lejos de sentirme triste, me sentí indignada, porque yo veía que las investigaciones iban a crear una cortina de humo, a decir que mi hija había actuado (en contra de) de ella misma y se había quitado la vida.
“Eso no la estigmatiza, ni la convierte en un ser despreciable, como pareciera que quieren hacer ver, no sólo a mí hija, sino a muchas mujeres; ni las niñas se salvan”, reclamó la señora Orozco.
«El dictamen pericial dice que ella murió por asfixia, lo cual hace que no sé cierre el caso», subrayó la mamá de Lesvy.
«Murió por asfixia, estrangulamiento, lo cual ya es un aporte, porque no se cierra el caso. Vamos a apelar a las instancias locales, nacionales e internacionales» dijo la madre y trabajadora adjunta de la Secretaría de Educación y Cultura de la UNAM.
“No vamos a permitir que a mi hija se le estigmatice de esa manera”, advirtió.
La señora Orozco también comentó que si bien su hija no estaba registrada como estudiante activa de la UNAM, «sí era universitaria» incluido pertenecía a la Estudiantina Femenil de la máxima casa de estudios».
“Mi hija se había separado un tiempo de la escuela porque estaba preparando su examen único para ingresar a la UNAM. Estaba en el CCH Sur, quería estudiar Letras Francesas o Relaciones Internacionales”, explicó.