El memorándum emitido por el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, para dejar sin efectos la ley educativa vigente es preocupante porque rompe el orden legal, al instruir a secretarios de Estado a incumplir la Constitución, alertó la fracción parlamentaria del Movimiento Ciudadano (MC) en la Cámara de Diputados.
En tanto, los diputados sin partido expresaron que respaldan la decisión de derogar por completo la reforma educativa impulsada el sexenio pasado.
Sin embargo, recalcaron que el Ejecutivo Federal está llamado a cumplir y hacer cumplir la Constitución, así como a mantener el diálogo con el Poder Legislativo, a fin de alcanzar el esperado acuerdo con los maestros disidentes.
En primera instancia, los diputados de MC enfatizaron que el instrumento firmado por el Jefe del Ejecutivo está en la esfera de lo ilegal.
Al sustentar argumentos en la falta de acuerdos sobre una nueva reforma educativa, y omitir el cumplimiento de las facultades y responsabilidades constitucionales del propio Primer Mandatario y de los funcionarios federales a los que va dirigido, violenta la ley.
Al exhortar al Primer Mandatario a respetar el artículo 89 constitucional, que lo instruye a la Carta Magna, los legisladores pidieron a los titulares de la Secretaría de Hacienda, Gobernación y Educación no ejecutar la orden, pues de lo contrario, incurrirán en delitos.
Tras solicitar que el Presidente cancele el “memorándum”, subrayaron que la ley no puede adaptarse a grupos de presión, como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que buscan controlar las plazas magisteriales.
Se declararon dispuestos a revisar nuevamente el dictamen de la reforma educativa aprobado en comisiones hace unas semanas, para eliminar en definitiva cualquier elemento que pudiese resultar punitivo para los docentes.
A su vez, el diputado Ricardo Gallardo, que funge como “líder” de los legisladores sin fracción parlamentaria, enfatizó que es necesario agotar el diálogo y apegarse a la ley porque no hay otra forma de fortalecer la democracia.
Dijo que sus compañeros sin partido en San Lázaro están a favor de una reforma educativa sin cuotas escolares, con educación e infraestructura de calidad, con maestros que den clases en las aulas y cuyos derechos laborales sean plenamente respetados.