La fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, propuso reformas, para que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) tenga la facultad de supervisar y regular el contenido de los videojuegos.
La diputada Aurora Cavazos, secretaria de la Comisión de Derechos de la Niñez en San Lázaro, manifestó que en el país no existen mecanismos o reglas para clasificar el contenido de juegos de video ni para regular su producción, distribución y venta al público.
La también integrante de la Comisión de Educación Pública de la Cámara señaló que al reformar la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, se podrá dar a los comisionados del IFT la capacidad de supervisar y regular los contenidos de juegos de video.
Indicó que con ello, la autoridad reguladora del sector tendrá la capacidad de instar a los realizadores y distribuidores de esos productos, a incluir advertencias y especificaciones sobre su contenido, a fin de impedir que niños, niñas y adolescentes tengan acceso a materiales no aptos para su edad.
Puntualizó que dichos juegos deberán incluir etiquetas que marquen claramente su clasificación, con el propósito de que materiales dirigidos al público adulto no estén al alcance de menores de edad; y en caso de incumplir esa disposición, los distribuidores sean sancionados.
La diputada Cavazos Cavazos señaló que de acuerdo a las estimaciones hechas hasta el momento, se prevé que a finales de este 2017, el mercado de videojuegos arroje ganancias por más de 22 mil 800 millones de pesos, 13 por ciento más que lo registrado en 2016.
Esto se debe, apuntó, a que ese tipo de contenidos son mucho más accesibles a través de teléfonos celulares, tabletas y otros dispositivos electrónicos móviles; y a que los precios de las consolas de videojuegos se han reducido.
La única normatividad que contempla la clasificación de contenidos audiovisuales es la Ley de Cinematografía, pero ésta no abarca los videojuegos, que en su gran mayoría provienen de Estados Unidos, Canadá y Japón, dijo.
Agregó que en aras de aplicar de manera integral las normas de protección a la niñez la adolescencia, es preciso que las autoridades correspondientes desarrollen un sistema propio y con estándares nacionales de clasificación de contenidos en videojuegos, a fin de que éstos no influyan de manera negativa en el desarrollo psicológico, emocional, cultural y social de los infantes.