Nogales, Sonora, 26 de marzo. Al grito de “Quédate en EU” y “No cruces la frontera”, un pequeño, aunque irreductible grupo de ciudadanos se manifestaron ayer del lado mexicano de Nogales para pedirle al gobierno más control de los cruces que llegan a través del puerto de entrada Dennis DeConcini. «Necesitamos proteger a nuestra población porque si el problema empeorara en nuestro país, México no tiene la capacidad económica, de infraestructura o médica para enfrentar la situación», aseguró José Luis Hernández, el líder de la singular protesta.
Como en una película de ciencia ficción, en la que ciudadanos de Estados Unidos intentan huir hacia México ante el avance de una amenaza en su propio territorio, el grupo de manifestantes bloquearon una de las principales vías de acceso a este puerto de entrada hacia Nogales, Sonora, con dos vehículos.
Pertrechados con cubre bocas y pancartas, los manifestantes pedían al gobierno de Andrés Manuel López Obrador “ponerse las pilas” para evitar que el contagio que ha crecido de forma exponencial en el vecino del norte, no cruce hacia México:
“Si no nos hacen caso vamos a cerrar la garita de aquí y la garita de La Mariposa, porque tenemos que garantizar la seguridad de nuestras familias”, advirtió.
“Se debe poner fin a las visitas turísticas y fines médicos no urgentes. Y esto incluye a ciudadanos de origen mexicano puesto que pueden venir contagiados por el virus que luego diseminan por territorio mexicano. Sólo se debería permitir el paso a personas que vienen por razones esenciales y que se demuestre que están en buenas condiciones de salud.
“El sector salud debe también garantizar que los migrantes son deportados por este punto que no estén enfermos”, añadió Hernández al frente de un grupo de ciudadanos que exigieron además que en las garitas haya personal médico para realizar un control efectivo.
“Esta medida no es para impedir el paso de nuestros países. Sino para evitar que el virus se interne en nuestro país”, sentenció al insistir al gobierno de Andrés Manuel López Obrador tome cartas en el asunto.
“Si no nos escuchan vamos a bloquear estos accesos de forma permanente”, advirtió.
La protesta de este grupo de ciudadanos mexicanos en la frontera norte se ha producido el mismo día en que la cifra de muertos en Estados Unidos por el coronavirus superó el hito de las 1.000 personas, mientras hospitales en Nueva York y otras ciudades lidiaban con un enorme flujo de pacientes, y el Congreso trabajaba en la aprobación de un paquete de ayuda por 2 billones de dólares.
Tan sólo en Arizona, las autoridades reportaban este jueves un total de 500 casos confirmados de contagios y al menos 8 muertos. En California, el caso más llamativo, la cifra de contagiados ya superó los 3, 243 contagios con un saldo preliminar de 68 muertos.