Cuauhtémoc Blanco se aferra a mantener «libre transferencia» de 17 mil millones de pesos en el presupuesto 2023 y retó a los diputados del Congreso local que le frenaron esta artimaña con la que podía disponer a su antojo de ese dinero público sin consultarlo con nadie.
En su clásica entrevista de banqueta, frente a periodistas a modo, que le cuestionan lo que el área de Comunicación Social les ordena, el gobernador de Morelos retó en el municipio de Jiutepec a los 15 diputados que, hasta ahora, están defendiendo un presupuesto más justo para los morelenses.
El exfutbolista, prácticamente dijo que el Presupuesto 2023 no se publicará en el periódico Oficial Tierra y Libertad, y cause efectos de inmediato porque no fue lo que ellos quieren que sea publicado y que recurrirán a una supuesta “controversia constitucional” para que se haga su voluntad y tenga de vuelta sus libres transferencias.
El Cuau calificó como un “agandalle” que los diputados ya no le permitieran disponer a su gusto y de manera discreta los recursos como lo hizo estos cuatro años que lleva al frente del Poder Ejecutivo.
Señaló que no lo van a permitir y que interpondrán una controversia constitucional para echar abajo esas modificaciones. Y muy a su estilo, en tono valentonado, Cuauhtémoc Blanco alzó los brazos y retó a los diputados de oposición a una batalla legal.
“Nosotros lo teníamos ya planeado porque sabíamos que se querían salir con la suya estos 15 diputados, pero no lo vamos a permitir. Como te digo no se vale que algunos municipios no les toque nada; es una falta de respeto.
-Será una lucha muy dura para el 2023 contra 15 diputados, se le cuestionó.
-Aquí estoy contra 15, he podido contra más, nos vamos con todo. No nos vamos a dejar. No pasa nada siempre he tenido ese carácter.
Ya en noviembre pasado, El Cuau también amenazó y retó al presidente de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública, Agustin Alonso Gutierrez por impulsar la cancelación de las libres transferencias.
El conflicto fue escalando porque 23 de los 36 alcaldes también se sumaron a las protestas de la aprobación del presupuesto, por considerar que no hubo piso parejo en el apartado para realizar obra púbica, pero el problema de fondo es que este paquete económico deja sin efectos que el mandatario pueda disponer a su antojo el dinero de los morelenses.