Por: Areli Gómez
A dos años del sismo del 19 de septiembre de 2017, en Jojutla son aproximadamente 80 familias de las 2 mil 900 damnificadas por el fenómeno natural las que aún se encuentran sin recibir algún apoyo debido principalmente a problemas de índole jurídico, por ejemplo, a que no han podido acreditar la propiedad de sus terrenos informó el alcalde Juan Ángel Flores Bustamante.
El munícipe aseguró que se han tocado puertas, haciendo las gestiones necesarias, como su reciente visita a David Cervantes titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu) y encargado del Programa Nacional de Reconstrucción así mismo la entrega de una carta al Presidente de México Andrés Manuel López Obrador con la intención de seguir solicitando el apoyo y liberación de los recursos para las familias que faltan por reconstruir sus viviendas.
«Estas familias aún no tienen nada, pero el número puede variar, algunos fueron registrados por el Fonden y otros no, bajo ese esquema es tener acercamiento y sobre todo la honestidad, hay familias que se les entregó el recurso y no lo han ejercido en la construcción de sus hogares, hay otros terrenos que se ven baldíos y la realidad es que no regularizaron sus predios y no tienen como demostrar la posesión», comentó.
Flores Bustamante fue claro al precisar que también existen casos en los cuales las familias decidieron no reconstruir casas porque su terreno lo consideraron comercial y pretenden edificar locales formales que requieren mayores recursos.
En el caso de la reconstrucción comercial, el edil lamentó que no existan créditos ni recursos etiquetados para los comerciantes, aún y con este obstáculo consideró que Jojutla ha cambiado.
«El gobierno federal no puede darles recursos etiquetados, si vamos recorriendo vamos viendo que el rostro ya es totalmente distinto y a lo que han dicho otras ciudades que han salido destruidas vamos rápido pero no podemos tocar campanas de que ya lo logramos», dijo.
Cabe recordar que en agosto de este año autoridades de la Comisión Nacional de la Vivienda (Conavi) dejaron plantados a los damnificados del sur de Morelos, quienes reclamarían el retrasos en la entrega de los recursos.
El avance en la reconstrucción de viviendas es lento y diverso, algunas familias ya tienen el 50 por ciento, gracias a los préstamos que solicitaron ante instituciónes bancarias.
Los damnificados han tenido que soportar en estos dos años las inclemencias del tiempo y hasta la delincuencia, con robo de material de construcción principalmente.
La falta de apoyos de los Gobiernos Federal y Estatal pasados, que dejó varios desvíos de recursos, lleva a los ciudadanos afectados a seguir viviendo de promesas.