La fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados, exigió al Gobierno Federal transparentar el tema de la ayuda internacional, incluyendo donativos, que México ha recibido en las últimas semanas a causa de los sismos de los pasados días 7 y 19 de septiembre.
La diputada Arlette Muñoz, integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores, enfatizó que es preciso saber cuánta ayuda y de qué tipo ha enviado a nuestro país la comunidad internacional, a fin de tener la certeza de que será destinada invariablemente a la reconstrucción y a favor de los damnificados.
Luego de la polémica generada por el donativo de mil 500 casas de campaña por parte del gobierno de Canadá, en apoyo a las personas afectadas por los más recientes sismos, que al momento de pasar por las aduanas mexicanas, según la contabilidad del Servicio de Administración Tributaria (SAT), eran solo 750, la congresista de Acción Nacional señaló que el Gobierno Federal está obligado a conducirse con la verdad y hacer pública en tiempo real, toda la información sobre los donativos internacionales.
Muñoz Cervantes expresó que las aportaciones monetarias y en especie de otros países, deben ser esclarecidas, para impedir que dichos recursos sean utilizados con fines ajenos.
Añadió que aunado a la creación de un fideicomiso que recabe los apoyos e informe detalladamente sobre sus montos y su destino, los legisladores del PAN piden que la
Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) genere un informe global en la materia y lo haga público.
Recalcó que, de acuerdo al gobierno de México, la reconstrucción de las zonas afectadas podría costar de 25 mil a 38 mil millones de pesos y en cuanto esos datos se conocieron, otros países y organismos internacionales ofrecieron apoyo económico.
Canadá anunció que otorgaría 100 mil dólares canadienses; Corea del Sur habló de un millón de dólares; El Vaticano agregó que cedería 150 mil dólares para la reconstrucción; mientras que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ofreció donar 4.6 millones de dólares; y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), se declaró dispuesto a donar 400 mil dólares más.
Ante esas muestras de apoyo, es preciso que el Gobierno Federal diga cómo, quién y cuándo ejercerán esos recursos, pidió la congresista.
Lamentó que no exista confianza en el gobierno mexicano ni en cómo manejará los donativos internacionales, lo que resulta penoso y aún más, está retrasando la distribución del apoyo entre las personas, comunidades, municipios y estados afectados.
«Nuestros amigos en el exterior se han solidarizado con México y es responsabilidad de los actores de Gobierno garantizar que esas muestras de apoyo lleguen a quienes hoy más lo necesitan «, planteó.