Mientras el estado de Morelos se encuentra en un momento crítico de inseguridad y violencia, principalmente en la zona sur, el gobernador Cuauhtémoc Blanco no aparece y cuando lo hace es para ejecutar su estilo de política en la que la autovictimización, la confrontación y la falta de sensibilidad con desconocimiento de las situaciones y crisis que se viven en Morelos.
Esta vez, Cuauhtémoc Banco Bravo fue captado muy despreocupado usando al Estadio Centenario, al norte de Cuernavaca como recinto privado para jugar sus «cascaritas» con sus amigos.
En las imágenes se puede distinguir al examericanista rodeado de sus guaruras mientras está organizando una cascarita a jugarse en la cancha principal del Centenario.
Cabe destacar que la única promesa de campaña que hizo Blanco para mejorar el estado fue «impulsar el futbol como deporte estatal con escuelas y espacios deportivos en los que se puedan desarrollar estas actividades», lleva más de tres años en el gobierno y todo el impulso al deporte ha sido por parte de la iniciativa privada, proyectos a los que se les ha negado el apoyo desde las dependencias estatales encargadas del deporte.
