Por: Javier Bermudez
La alternancia política en los últimos sexenios en México se ha dado de manera espectacular, desde el triunfo arrollador de Vicente Fox en el año 2000 hasta esta elección federal pasada, la alternancia como un péndulo ha oscilado de la derecha a la izquierda y al centro, confirmando la teoría del Péndulo Democrático que es sencilla, y quizás por ello de fácil comprensión por los intelectuales conservadores y sus epígonos.
Esta teoría habla de la existencia de un movimiento pendular en cuanto a las formas del Estado, es decir, en tanto, las manifestaciones que tiene un Estado en determinados momentos; digamos que en la parte izquierda del péndulo se encuentra el Estado progresista y en la parte derecha se encuentra el Estado conservador, los vaivenes de la política en cada Estado, o en cada país, oscilan en este péndulo, mientras más se aproxima algún movimiento político a la izquierda se encuentra más “cerca” de apresurar el advenimiento de la derecha, y viceversa, es decir, mientras más te aproximas a la construcción ideal de un estado progresista , más te aproximas a un estado conservador , y mientras más te aproximas a la construcción ideal de un estado conservador más te aproximas a un progresista.
Esta lógica binaria, entre la derecha y la izquierda en un ciclo pendular parte de la aseveración funcionalista de los roles que debe cumplir cada gobierno en determinado momento, si el gobierno no mantiene relativo equilibro dentro de su manejo gubernamental y dentro de las políticas públicas, lo más probable es que lo que tendría previsto construir no se realice, o en su defecto fracase. Como dijimos antes, el péndulo viraría hacia su opuesto.
Los electores y aún las bases de los partidos susceptibles de manipulación electoral ya sea por dádivas o por coacción del voto han modificado sus prácticas a la hora de emitir los votos en las elecciones, ahora la gente está más informada, es más crítica y ha comprendido que ejercer el voto constituye un valor, manipular no es fácil y el castigo en las urnas parece ser una catarsis que ejerce el votante cuando el gobernante lo decepcionó, la frase : »recibe todo lo que te den pero vota por el que tú quieras» se ha hecho una constante y hemos visto que el dinero no hace ganar las elecciones, sí a esto sumamos que algunas entidades federativas se caracterizan por tener una extraordinaria volatilidad electoral como ocurre aquí en el estado de Morelos en donde pasamos de un sexenio a otro a escoger partidos antagónicos, cómo se explica qué en el 2006 votaron por un partido de derecha y en el 2012 ganó un partido de izquierda, así pues lo imposible puede pasar y los escenarios siempre son impredecibles.
En general podemos afirmar que la teoría del péndulo democrático va acompañado como ha ocurrido en europa y en América latina del voto de castigo para los gobiernos que no cumplen con las expectativas cada día más altas por parte de la población, a veces puede constituir un gran riesgo el votar por enojo o por el castigo a la clase política, la frase : » si ellos nos roban pues que roben otros » es un razonamiento oprobioso y peligroso.
Las elecciones federales intermedias en especial para escoger los diputados federales que nos representarán son de vital importancia para el presidente de la república, será imperioso tener mayoría en el congreso en la segunda parte del sexenio ya que los ataques de la oposición serán más feroces y seguramente tendrán más tela de donde cortar, las cosas no serán fáciles para morena, el desgaste del ejercicio del poder, los pleitos internos por las candidaturas y los resultados funestos de muchos gobernadores que emanaron de este movimiento constituirán un riesgo muy alto para estados como Morelos, Veracruz, Chiapas y ciudad de México en donde la delincuencia cobrará la factura a los gobernantes emergidos por morena, habrá que sumar el resentimiento de las bases que fueron desplazadas por decisiones pragmaticas cómo ha sucedido en Tabasco, Chiapas y Morelos.
Según las últimas encuestas elaboradas por massive caller en donde miden la preferencia ciudadana por partido con rumbo a las elecciones para las gubernaturas en el 2021 estados como Campeche, Chihuahua, Colima ,Guerrero, Sonora, San Luis Potosi, Michoacán, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas serán ganados ampliamente por candidatos emergidos por morena, y ahí el denominador común será el voto de castigo a los resultados funestos de los gobernadores priistas panistas y perredistas, en especial Michoacán, Tlaxcala, Sinaloa y Chihuahua cómo ejemplo, pero en Querétaro y Nuevo León el PAN es favorito y Tamaulipas y Yucatán gobernados por este mismo partido sus gobernadores han mostrado buenos resultados y seguramente los diputados federales que resulten triunfadores en estos 4 estados serán panistas, así el escenario político nacional parece definirse con una primera fuerza conformada por morena seguida de una segunda fuerza conformada por el partido acción nacional pero la brecha entre estos dos partidos políticos puede ampliarse o reducirse según los resultados o la imagen que ofrezca el gobierno federal en los siguientes meses existiendo una alta posibilidad de que morena pierda la mayoría en el congreso de la unión.
En nuestro estado el escenario será complicado para morena con altas posibilidades de que se pierdan varios distritos federales, municipios y la mayoría en el congreso del estado , todo esto por las disputas al interior de morena en donde existen varios grupos que desde ahora apuntan hacia el 2024, los malos resultados de los gobiernos municipales, muy limitados en recursos y obra pública y el pésimo desempeño del gobierno estatal que a pesar de ser emanado del PES la gente lo vinculará con morena, así pues en Morelos si el partido acción nacional logra ganar Cuernavaca, las posibilidades de ganar el gobierno del estado en 2024 serán muy altas, confirmando la teoría del péndulo democratico.