El barco «Calypso» de Jacques-Yves Cousteau (1910-1997) irá próximamente a remate judicial tras un conflicto entre familiares del oceanógrafo francés y el astillero donde se encuentra desmembrada y herrumbrada la famosa nave de exploración.
Triste figura la del barco que surcó los mares del mundo al mando del comandante Cousteau y que desde 2007 se encuentra en pésimo estado en el hangar Nº8 de los astilleros Piriou de Concarneau, pequeño puerto bretón del oeste de Francia.
Apenas se reconoce al frente del casco la estructura oxidada del puente de observación de proa del «Calypso», un dragaminas británico de la Segunda Guerra Mundial reconvertido en nave oceanográfica por Cousteau y que se hundió en un muelle de Singapur en 1996, un año antes de la muerte del famoso explorador de gorra roja.
El viernes venció el plazo judicial fijado al Equipo Cousteau que encabeza Francine Cousteau, viuda del explorador, para que retiren los restos del barco. Los astilleros Piriou anunciaron que hicieron los trámites necesarios para que el pecio sea ofrecido al mejor postor, en una subasta que se organizará en una fecha aún no precisada.
La idea inicial era armar un museo en los muelles del puerto, lo cual hubiese costado un millón de euros. Pero las obras se interrumpieron a raíz de un diferendo entre el Equipo Cousteau y los astilleros.
– A la espera de un inversor -«Pienso que podemos hallar gente acaudalada que puede interesarse por el tema y que esté dispuesta a invertir dinero» para restaurar el barco, había indicado el mes pasado Pascal Piriou, dueño del astillero. «Hay mucho trabajo por delante, pero es posible», afirmó.
Por su parte, el Equipo Cousteau dijo confiar en alcanzar una solución al diferendo.
Fuentes del astillero Guiop del puerto bretón de Brest, especializado en la restauración y la construcción de barcos de madera habían sido contactados recientemente por el Equipo Cousteau para reflexionar acerca de qué hacer con el buque.
«Al parecer sólo queda un esqueleto, pero con todo se mantiene una estructura con cierta rigidez que permitiría transportarlo», dijo un experto de Guiop.
A nivel mundial «tal vez sea el único barco francés conocido» y cuesta imaginar que lo dejen morir por completo, agregó.
Un comunicado de los astilleros Piriou, que reclaman al Equipo Cousteau 273.000 dólares por el depósito y obras ya realizadas, anunció el viernes que a través de la subasta los astilleros se proponen «hacer lo necesario para tener las manos libres del punto de vista legal y hallar la mejor solución que nos permita obtener la suma que nos deben, liberar nuestros locales y dar al Calypso un futuro digno de su leyenda.
Jacques-Yves Cousteau, que denunció durante cuatro décadas a partir de los años 1950 «el saqueo y vergonzoso ultraje de los océanos a causa de una visión equivocada del progreso» surcó los mares del mundo para rodar filmes sobre el fondo marino que fueron vistos por millones de televidentes en el mundo entero.