Con una historia de tres generaciones hombres y mujeres artesanos presentaron oficialmente la Asociación de Pirotécnicos de Morelos A.C., denominada “PIROMOR, A.C.” la cual está integrada por más de 100 artesanos y 70 años en la profesión con presencia en la entidad.
“El gremio está afectado un 99 por ciento, ya que no hay eventos religiosos, culturales ni sociales, las costumbres y festividades patronales son nuestros mejores mercados, sin embargo, nuestras actividades se han visto mermadas todo un año suspendidas las quemas por el COVID-19” aseguro Esteban Anzures Espinosa presidente de la asociación.
Tradición y oficio heredado por nuestros antepasados actualmente trabajamos con siete talleres o polvorines y más de 100 familias en la elaboración artesanal de la pirotecnia tradicional de fuego directo y mecha de seguridad, regidos bajo la norma de la Defensa Nacional bajo el artículo 44 de la ley federal de uso de armas de fuego y control de explosivos.
“Nosotros no manejamos la juguetería que es la más peligrosa, además del clandestinaje quienes trabajan con productos sucios de dudosa procedencia que no cumplen con los parámetros oficiales”, aseveró Anzures Espinosa.
La producción y el uso de fuegos artificiales llegaron a México a través de Europa, el ingrediente principal para los fuegos artificiales, la pólvora, fue traída por los conquistadores en el siglo XVI. Las culturas pre hispánicas tenían formas de manipular fuego para fines ceremoniales, la popularidad de fuegos artificiales llegó a México después, en el siglo XIX.
Un castillo puede alcanzar hasta 67 metros de altura rompiendo el récord, pero los normales son de 30 metros con un precio de 50 mil a 120 mil pesos, mientras en el caso de los toritos de mil 500 a 800 con luz y buscapiés.
“Ahora ya con las detonaciones controladas por audio y detonadores a distancia; La pirotecnia en frio es un espectáculo más seguro que principalmente se usa en bodas y eventos sociales dentro del estado y fuera”.
Al norte de la Ciudad de México se localiza el municipio de Tultepec, donde se concentra el 80 por ciento de toda la producción de fuegos artificiales en México, los cuales se clasifican en juguetería y pirotecnia espectacular y se calcula que cerca de cincuenta mil familias viven de este oficio según datos recabados por el Instituto Mexiquense de la pirotecnia (IMEPI).
UN POCO DE HISTORIA
Los fuegos artificiales fueron inventados por los chinos, para usos ceremoniales y religiosos, el cual es su principal uso en México hoy en día.
La producción y el uso de fuegos artificiales llegaron a México a través de Europa. El ingrediente principal para los fuegos artificiales, la pólvora, fue traída por los conquistadores en el siglo XVI. Las culturas pre hispánicas tenían formas de manipular fuego para fines ceremoniales, la popularidad de fuegos artificiales llegó a México después, en el siglo XIX.
En la actualidad, Latinoamérica es la segunda mayor productora de fuegos artificiales, la mayoría para uso doméstico, con productos que van desde pequeños petardos hasta grandes fuegos artificiales como los llamados “castillos” y “toritos”.
